Pide de regalo de cumpleaños, una guitarra Stratocaster blanca, el amplificador Peavy y el distorsionador DOD.
Hoy por teve de paga, transmiten Live Aid, concierto de ayuda para combatir la hambruna en Etiopia.
La mañana larga, frente al monitor.
Solo se despega para ir al baño o para extraer del refrigerador la Pepsi en lata.
Mario tiene 14 años, vive en Houston Texas, su madre, manager del complex en Woodlands, donde el único latino, como él, es quien hace la limpieza.
Joan Baez, ante los miles que la siguen en vivo, los millones, como Mario, por teve, les dice: este es tu Woodstock, antes de comenzar a tocar.
Escuchara a U2 antes que graben el Joshua Tree. Los Power Station con Robert Palmer greñudo, vestido como Mick Jagger o David Bowie.
Mario, quien jamás será rocker, terminará enrolado en el army, obteniendo el corazón púrpura y la ciudadanía after death, para toda la familia, cuando God Bless América and our troops under fire, ataque por primera vez Irak.
Desde el campo de batalla, en la tanqueta que esta por explotar, habla Mario con sus compañeros mortales que será rocker una vez que lo licencien.
Perpetúa la última reunión de Led Zeppelin con Phil Collins en la batería, el rencuentro de Black Sabbat o a Tina Turner con Eric Clapton, Mark Koffner y Sting en el Live Aid.
No comments:
Post a Comment